Luis y Celia Martin, padres de Santa Teresita
San Luis Martin y Santa Celia Guérin, padres de Santa Teresita de Lisieux, fueron el primer matrimonio en ser canonizado en una misma ceremonia en la historia de la Iglesia el 18 de octubre del 2015, por el Papa Francisco durante el Sínodo de la Familia. Su fiesta se celebra el 12 de julio, día de su aniversario de bodas.
“Los santos esposos vivieron el servicio cristiano en la familia, construyendo cada día un ambiente lleno de fe y de amor; y en este clima brotaron las vocaciones de las hijas, entre ellas Santa Teresa del Niño Jesús”, dijo el Papa Francisco durante la Misa de canonización.
Luis Martín trabajó como relojero y joyero, y Celia Guérin como pequeña empresaria de un taller de bordado. Junto con sus cinco hijas, emplearon tiempo y dinero en ayudar a quienes tenían necesidad.
Luis Martin nació en Burdeos (Francia) en 1823 y falleció en Arnières-sur-Iton (Francia) en 1894. Mientras que María Celia Guérin nació en San Saint-Denis-Sarthon (Francia) en 1831 y falleció en Alençon (Francia) en 1877. Ambos fueron personas devotas desde muy jóvenes. Antes de conocerse, María Celia quiso llevar una vida religiosa en el monasterio de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl, mientras que Luis Martin sintió el mismo deseo de consagrar su vida a Dios y se dirigió al monasterio del Gran San Bernardo.
Ninguno fue aceptado puesto que Dios tenía otro plan para ellos. Luis y Celia se cruzaron por primera vez en abril de 1858 en el puente San Leonardo. Ella quedó impresionada por ese “joven de noble fisonomía, semblante reservado y dignos modales”, y sintió que una voz interior le decía que ese era su futuro esposo. El entendimiento fue tan rápido que contrajeron matrimonio el 13 de julio de 1858, a solo tres meses de su primer encuentro. Las cartas de Celia reflejan el amor que sentía por Luis: “Tu mujer que te ama más que a su vida” y “Te abrazo tanto como te amo”.
Llevaron una vida matrimonial ejemplar: misa diaria, oración personal y comunitaria, confesión frecuente, participación en la vida parroquial. Tuvieron nueve hijos, cuatro murieron prematuramente y sobrevivieron cinco niñas. A todas les transmitieron el amor a Dios y al prójimo. Además, sus negocios no fueron impedimento para que pasaran tiempo de calidad con ellas.
La menor de las cinco hijas era Santa Teresita, la futura santa patrona de las misiones, que es una fuente preciosa para comprender la santidad de sus padres: educaban a sus hijas para ser buenas cristianas y ciudadanas honradas.
Cuando tenía 45 años, Celia se enteró que tenía un tumor en el pecho. “Si Dios quiere curarme, estaré muy contenta pues, en el fondo de mi corazón, deseo vivir; lo que me cuesta es dejar a mi marido y a mis hijas. Pero, por otra parte, me digo: si no me curo es que, quizá, será más útil que yo me vaya”, escribió en una carta. La santa vivió esta enfermedad con firme esperanza cristiana hasta que falleció el 28 agosto de 1877 a la edad de 46 años y 19 de vida conyugal, rodeada de su esposo y su hermano Isidore.
Luis se trasladó a Lisieux, donde vivía Isidore, y la tía Celina lo ayudó a cuidar de sus cinco hijas. Años más tarde, todas se hicieron religiosas, cuatro en el Carmelo y una en la Visitación. El sacrificio mayor fue separarse de Teresa, a quien llamaba “su reinecita” y que entró en el Carmelo a los 15 años e iniciaría su camino a la santidad
Luis, contrajo una enfermedad que lo fue mermando hasta perder sus facultades mentales. Fue internado en el sanatorio del Buen Salvador en Caen. Durante los períodos de alivio se ofreció como víctima de holocausto a Dios, hasta que murió el 29 de julio de 1894 a los 71 años de edad.
En 1946, el obispo de Lisieux expresa su deseo de examinar la causa de los padres de Santa Teresita, Luis y Celia Martin. El Papa San Juan Pablo II firmó en Roma, el 26 de marzo de 1994, año de la Familia, el decreto de “heroicidad” de las virtudes de Luis y Celia Martin.
Los esposos Martin, son proclamados Beatos en Lisieux, el 19 de octubre de 2008 por el Papa Benedicto XVI. El 27 de junio de 2015, en Consistorio público, el Papa Francisco anuncia la fecha de la canonización de los Beatos Luis y Celia Martin, canonización que tuvo lugar el domingo, 18 de octubre de ese mismo año en Roma.